PISO RADIANTE
La climatización por piso radiante es ideal para viviendas de uso continuo o bien lugares con alturas mayores a los 3 metros. Esto se debe a que la temperatura se irradia desde la base generando que en la altura sensible o de incidencia se conserve la energía. La temperatura que el cuerpo humano efectivamente percibe es la media entre las temperaturas de las superficies y la del aire. Por esto, al calentar una de las superficies, el suelo en este caso, la temperatura del aire puede disminuir sin afectar la percepción del cuerpo eliminando la sofocación que se produce en los entornos sobrecalentados.
La instalación de piso radiante o piso radiante refrescante se realiza a partir de la platea o losa. Sobre esta base se coloca el aislante que beneficiará la difusión de la energía hacia la superficie impidiendo que se pierda en la base de la obra o transmita de un nivel al otro. Sobre la aislación se emplaza una malla electrosoldada y las tuberías por las que circulara el agua para climatizar la vivienda. Su densidad será la resultante según las exigencias que la obra requiera. Por último, se vierte una carpeta de 40 mm que servirá de transmisor entre las tuberías y el ambiente. Recomendamos la utilización de fluidificantes en la mezcla para brindar una mejor elasticidad en ella.
El piso radiante ofrece una serie de beneficios en comparación con los sistemas de calefacción tradicionales, como los radiadores o los sistemas de aire forzado. Estos beneficios incluyen:
El piso radiante ofrece diversos beneficios que lo hacen una opción atractiva para la calefacción en el hogar:
- Confort térmico: Proporciona una distribución uniforme del calor, garantizando que los pies estén calientes y la temperatura a nivel de la cabeza sea confortable, siguiendo el principio de “pies calientes, cabeza fresca”.
- Eficiencia energética: Al operar a temperaturas más bajas que los sistemas de calefacción convencionales, el piso radiante puede reducir el consumo energético y, por lo tanto, disminuir los costos de calefacción.
- Estética y espacio: Al estar oculto, el sistema no ocupa espacio en las paredes ni afecta la estética del hogar, permitiendo mayor libertad en la distribución y decoración de las habitaciones.
- Calor saludable: Reduce la circulación de polvo y alérgenos en comparación con los sistemas de calefacción por aire forzado, lo cual es beneficioso para personas con alergias o problemas respiratorios.
- Silencioso: A diferencia de otros sistemas, el piso radiante opera sin ruido, lo que contribuye a un ambiente más tranquilo.
- Mantenimiento reducido: Una vez instalado, requiere poco mantenimiento en comparación con otros sistemas de calefacción tradicionales.
- Compatibilidad: Es compatible con una variedad de fuentes de energía, incluyendo renovables como la solar, lo que puede integrarse fácilmente en proyectos de construcción sostenibles.
En conclusión, el piso radiante no solo mejora el confort y la eficiencia en el hogar, sino que también ofrece ventajas en términos de salud, estética y sostenibilidad.